top of page

"En dos años hemos doblado los equipos y licencias del fútbol femenino"

Como coordinador de selecciones de la Federación de Fútbol de la Comunidad Valenciana (FFCV), nadie mejor que Juan José Alfonso Baixauli para contar el día a día del deporte rey y de los jóvenes talentos valencianos que, año tras año, pasan por sus manos: "Alcácer y Gayà son como de mi familia"

-Pregunta: ¿Cómo es el día a día en la Federación?

Respuesta: Se encarga de organizar toda competición que se desarrolla dentro del fútbol en la Comunidad Valenciana. Esto incluye masculino, femenino, playa, sala y las variantes fútbol 8 y fútbol 11. Hacer los calendarios, designar árbitros, poner de acuerdo a los equipos contendientes…

-¿Cuándo entras a formar parte de la Federación?

Entro en 2006 de directivo y ese mismo año el Presidente me pregunta si quiero encargarme de la coordinación de las selecciones valencianas. Tuve que sacarme el curso de director deportivo para coordinar 10.000 infantiles, 10.000 cadetes y 12.000 juveniles. Empecé a moverme por los campos, conocer a los secretarios técnicos de los equipos, hablar con representantes… Y cuando hay cambio de entrenador, tengo que buscar candidatos.

-¿Existe alguna condición a la hora de hacer las convocatorias?

La norma de una selección es que tiene que tener a cuatro chicos de primer año, de los cuales dos como mínimo tienen que estar siempre en el campo. Además, no puede haber más de tres jugadores de un mismo equipo. Eso interfiere mucho a la hora de prescindir de jugadores. Un ejemplo es Carlos Soler, jugador del Valencia, que se ha quedado muchas veces fuera por venir otros compañeros suyos.

"Albelda, pese a no tener una técnica propia de Primera División, lo suplía con trabajo, constancia y equilibrio mental, rasgos incluso más importantes"

-¿Qué crees que influye para que un jugador despunte a una edad u otra o no lo haga nunca?

El jugador que nace con las dotes técnicas suele ir evolucionando hasta que da el salto, pero lo puede hacer antes o después según los entrenadores que tenga o su actitud, que es siempre fundamental. Hay otros que carecen de técnica u otros, como Bernat y Gayà, que carecían de físico. A mí me decían que eran jugadores de futbolín, pero se les veía que llevaban algo dentro. Cuando el físico ya no es limitación como antes (parte de culpa la tiene el Barcelona con el juego de los bajitos), esos jugadores ya no tienen ese hándicap tan importante. Eso sí, tienen que trabajar día a día, ser constantes y tener un equilibrio mental. Aquí entraría gente como Albelda, un trabajador nato y de físico que, pese a no tener una técnica propia de Primera División, lo suplía con otros rasgos que son incluso más importantes.

-En una de las ponencias de un reciente evento sobre Fútbol Femenino que se celebró en Aldaia, se comentó que hay muchos niños que se dejan el fútbol en edades complicadas para ellos. ¿Desde aquí tratáis ese asunto para evitar la fuga de talento?

Lo único que podemos hacer aquí es pedir informes a los clubes para saber la mejor forma de tratar con el futbolista. Siempre desde la humildad, es lo que pedimos a los chicos, que aunque no atraviesen un buen momento, compañerismo ante todo. Solo he tenido un problema serio con un jugador: se llama Isco y juega en el Real Madrid. En realidad el problema fue con su entrenador a raíz de que lo cambiara durante un determinado partido. Luego hubo lío en el vestuario y tuve que hablar con él. Fue en una prórroga de una final contra la selección catalana de Deulofeu, Rafinha… Creo que tenía razón y el míster se equivocó, pero no se puede reaccionar así.

"Solo he tenido un problema serio con un jugador: se llama Isco y juega en el Real Madrid"

-Vivís la evolución futbolística y personal de los chavales. ¿Guardas especial relación con alguno?

Me acuerdo de todos. Desde el primer año que fueron campeones de España en alevines Gayà, Salva Ruiz, Grimaldo… Y en infantiles estaba Paco Alcácer, Isco, Portu, Rubén García, Ivan López… También recuerdo a Carles Gil, Kiko Femenía y, más tarde, Antonio Sivera, Alfonso Pedraza… Todos los años sale una media de dos jugadores que debutan en Primera. Y se ha dado el caso de concluir un torneo y, al día siguiente, habían fichado por un club extranjero, como Pedro Chirivella al Liverpool o Aleix García al Manchester City. Pero es cierto que hay algunos a los que llegas a tener un cariño especial. En mi caso, Alcácer y Gayà son como de mi familia.

-¿Qué llegas a sentir por esos jugadores cuando debutan con sus equipos en Primera o con la selección española?

Evidentemente es un orgullo y una satisfacción. Cada semana juego en siete u ocho campos (ríe). Juega el Valencia y está Gayà, juega el Barcelona y está Alcácer, juega el Villarreal y está Adrián Marín, juega el Girona y está Portu… Un caso especial era Robert Ibáñez, porque pasaba categoría por categoría y no crecía, hasta que dio el estirón y ahora está más fuerte.

-Estuviste el pasado verano en el Europeo sub17 que España ganó en la final contra Inglaterra. ¿Cómo viven jóvenes de 16/17 años un campeonato de tantas dimensiones?

Lo viven igual que cualquier club que va a jugar una final de Champions. Un campeonato como ese es el techo máximo que existe para su edad. La alegría que se llevaron ellos y sus familiares lo recordarán de por vida. El año de Paco Alcácer que perdieron en la final, habían eliminado antes a la Francia de Pogba, Kondogbia y Umtiti. Recuerdo salir del vestuario con Ginés Meléndez y ver pasar por delante a esos jugadores. Si vieras la cara con la que los miraban Bernat o Denis Suárez… La diferencia de físico era muy grande. Impresionaban.

-Has nombrado a Gayà, Bernat, Salva Ruiz… Lo del Valencia y los laterales izquierdos, ¿es coincidencia?

Sí, es una coincidencia. Son situaciones que se van dando. Jordi Alba jugaba de extremo, Gayà cuando llegó de alevines era delantero centro… La casualidad es que hayan salido zurdos. Y ahora Toni Lato.

-¿Guardáis relación con los agentes?

Yo soy amigo de casi todos, pero prefiero no saber qué jugador llevan, así no estoy influenciado con ese chaval para bien o para mal. Por ejemplo, me llevo muy bien con Javi Garrido y él ya sabe que me mantengo al margen. Puedo tener mucha confianza con alguno pero dejar fuera de la convocatoria a su jugador.

-¿Qué opinas de la reglamentación actual en cuanto a la transferencia de futbolistas en edades tempranas?

Se puede sancionar a los clubes si se demuestra que han negociado por niños menores de 10 años que han venido a España desde el extranjero por motivos relacionados exclusivamente con el fútbol y no por contratos de trabajo para los padres, o similar. Es lo que le ha ocurrido al Atlético de Madrid, al que se le han reconocido unos 280 casos. Con esto, la FIFA intenta evitar crear un mercado de niños de países menos desarrollados.

-¿Y del papel de los agentes y representantes?

En la selección autonómica sub12 ya tienen todos agentes. Nosotros intentamos mantener a los chicos centrados en sus obligaciones, por lo que sabemos cómo les va en el colegio y el instituto. Incluso si tienen problemas en casa o de índole externa. Es una norma que los agentes comprenden y les hacen ver que llegar alto es muy difícil y que los estudios son lo primero. Yo mismo me sorprendí del porcentaje de chavales cuyos resultados académicos eran positivos.

"Cada vez los equipos son más conscientes de que los estudios son lo primero"

-El Villarreal es famoso por llevar al día las notas en el colegio y premiarlos con más o menos minutos en los partidos. ¿Consideras al equipo castellonense un ejemplo a seguir?

El Villarreal siempre ha ido por delante de Valencia y Levante, aunque lo han adaptado con el paso del tiempo. En el caso del Valencia, la entrada de Rufete fue fundamental para desarrollar esa labor. Cada vez los equipos son más conscientes de que los estudios son lo primero.

-La evolución del fútbol femenino, ¿cómo la tratáis desde la Federación?

Cuando yo entré hace unos diez años había alrededor de dos mil licencias y un club que destacaba respecto al resto, el Colegio Alemán, equipo que se quedó el Valencia posteriormente. El Levante y el Plaza Argel de Alicante eran las otras entidades pioneras. En los dos últimos años hemos hecho gran cantidad de clínics por muchas poblaciones valencianas con el fin de atraer y buscar jóvenes talentos femeninos. En ese plazo se han doblado los equipos y las licencias. La televisión ha ayudado mucho. Está viviendo una evolución natural que no sé lo que durará, aunque puede preverse fijándonos en los países nórdicos o Estados Unidos, quienes van por delante. No sé si alcanzaremos ese nivel, pero vamos por el buen camino si seguimos el estilo de juego que nos hizo campeones en el masculino.

-De hecho, hay clubes que están apostando por el fútbol femenino sobre el masculino.

Totalmente. También ha pasado que una alcaldesa apostara por el fútbol femenino porque ella misma lo había practicado, lo que posibilitó una colaboración institucional. Tenemos mucho que decir en este aspecto y vamos a seguir apoyando desde la Federación al fútbol femenino para favorecer su crecimiento.

"Desde la Federación, vamos a seguir apoyando al fútbol femenino para favorecer su crecimiento"

-¿Recuerdas especialmente algún caso de jugador que iba para estrella pero que se quedó en el camino?

Hay muchos y es un poco decepcionante, porque le coges el mismo cariño que al resto y ellos tienen la misma ilusión que sus compañeros, pero no todos pueden llegar. Hace poco hablé con un chaval que era central y tenía gran proyección, pero no lo reconocí al principio por la foto. Resulta que era Pepelu, actual periodista deportivo de la 94.5 con Paco Lloret. Tenía físico, salida de balón… Me preguntan sobre esa selección y hubiera dicho que ese chico iba a llegar lejos.

-Un caso muy famoso es Miguel Nemesio, quien fuera capitán en el Valencia de Isco o Alcácer y de la Selección Española.

Me ha venido a la cabeza conforme me hacías la pregunta. Era una de las máximas promesas del fútbol mundial a nivel de cadetes. Por desgracia se quedan muchos (se emociona).

-¿Cuesta compaginar este trabajo con la familia?

Debe costar, pero yo nunca he tenido problemas en casa. Ahora, si me llegan a decir algo… igual hubiera cambiado la cosa (ríe). Los Toldrá, Juan Sánchez, Robert antes de ser director deportivo del Barcelona… Hablo con ellos cuando coincido en los estadios y cada semana están en un lado, sobre todo los fines de semana que es cuando hay partidos. Mi mujer y mi hijo saben que los sábados y domingos son de fútbol, fútbol y fútbol.

"Nunca olvidaré a todos los niños que se quedaron por el camino"

-¿Qué es el fútbol para ti y qué le queda a Juanjo dentro de este mundillo?

Llega una edad que es complicado, pero eso de llegar a un campo y vestirte de futbolista… Jugaba en el colegio, en la calle y luego en el Catarroja, hasta que a los 14 años me cogieron en el Valencia. Fuimos más de mil a probar y se quedaron con un equipo de quince jugadores para infantil-cadetes. Esa época era el más feliz del mundo. Luego se complicó porque había gente como Claramunt, Sol o Forment… No fui uno de los elegidos. Jugué en Tercera División y el Valencia me cedió un par de veces, pero no progresé más. Me encantaba esa forma de vida, pero también lo que comencé a hacer a continuación, primero como directivo del Catarroja y luego en mi cargo en la Federación. Relacionarte con gente de fútbol como Fernando Hierro, Santi Denia, Luis Milla… Incluso entre federaciones autonómicas. Somos como una familia. Hasta que la salud y las ganas perduren… Todo lo vivido ha sido impagable.

-¿Te quedas con algo en especial?

Siempre me acuerdo de los triunfos, pero más de los fracasos. Nunca olvidaré a todos los niños que se quedaron por el camino.

Comments


SÍGUENOS EN:
  • Facebook
  • Twitter
  • Instagram
bottom of page